Cae la lluvia calando hasta mis huesos
Agua limpia que resbala llevándose lo oscuro.
No la siento en mis ojos secos,
ellos sólo miran perdidos.
En nada me reflejo
Y el conocimiento me atenaza.
He crecido, a mi pesar
La vida se desenrosca en grises.
Misteriosa
Entonces tú tampoco llueves.
ResponderEliminarLo lamento :-(
Un abrazo fuerte.
Jajaja, me ha hecho gracia tu conclusión :)
ResponderEliminarUn abrazo fuerte y un beso.
Genial tu verso, lluvia, grises, esea poesia tiene todo lo que me gusta. Un abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias, Ester :)
EliminarUn beso muy grande.
La vida va de matices, de colores a grises, claro que al crecer, a nuestro pesar, se notan más los grises.
ResponderEliminarBesos dulces.
Sí... Es una pena.
EliminarMuchos besos dulces.
Y también en claroscuros, no lo dudes.
ResponderEliminarUn beso.
Creo que sí...
EliminarMil besos.
Entre matices de colores la vida pasa y crece para ver con el tiempo que poco a poco nos vamos trasformando en alguien mejor.
ResponderEliminarBesos
Ojalá... Eso es lo que hay que intentar, ser alguien mejor...
EliminarMuchos besos, bonita.