La lejanía dentro de la ausencia, traía tormenta de tristeza, el viento silenciaba su palabra. La pasión contaba el tiempo hasta que llegaran los días azules. Miraba preocupada el cielo por si se despintaban las nubes.
Le gustaba reír con él, añoraba el susurro de su voz, su alegría. Anhelaba que sus preciosos ojos centellearan con su reflejo, añoraba sus juegos.
Sentía en su mano como latía el corazón en la espera. Con él conoció la alegría, siempre devolvía el color a sus mejillas y deseaba sentir de nuevo el risueño sobresalto en su llegada.
Eran deslucidos los días sin su presencia. Le adoraba…
Misteriosa
Hola Nuevamente, me parece que hubo una ausencia por vacaciones, verdad?
ResponderEliminarQué preciosa imágen, tanto en la foto de cabecera, como en el texto. El tiempo de la añoranza que nos lleva a mirar el cielo, escuchar el viento y desear la presencia de persona amada.
Hermoso. Un beso
Hola Celia, en realidad aún estoy de vacaciones; pero aquí, en Soria, me conecto. Fuí una semana a Málaga, y allí no tengo conexión.
EliminarEs como dices.
Muchas gracias por tus palabras. Me da mucha alegría volver a verte.
Besos.
La alegría que el amor trae consigo.
ResponderEliminarMuy lindo
Besos
Muchas gracias, Alejandro.
EliminarUn beso.
Es que hay presencias que llenan toda una vida y la pintan de los mejores colores.
ResponderEliminarDulces besos como siempre.
Bonitos recuerdos que vuelven a tus letras.
ResponderEliminarUn beso.
Añoranza de momentos felices que dices tan lindo.
ResponderEliminarHermosa imágen. besos